Existe la creencia de que un texto, cuanto mas enrevesado y oscuro, mas fácil es el pasarlo por algo meritorio, habida cuenta de que el que lo que no se entiende se toma por algo fuera del alcance de uno mismo. Quizá no hay mejor medida de subdesarrollo moral e intelectual en una sociedad que la medida en que se oculta y/o oscurece la información.
A continuación figura un párrafo al azar de un texto de uno de los muchos diarios, diaris y diariños oficialeiros que hay por todas las comunidades y comunidadas. Se aconseja tomar aire antes de leer:
"Visto que hay un puesto de trabajo vacante del grupo A, sector General, en la Conselleria de Empresa, Universidad y Ciencia, cuya provisión se ha de efectuar por el sistema de Libre Designación, de acuerdo con lo que dispone la Ley de la Función Pública Valenciana y el Decreto 33/1999, de 9 de marzo, por el que se aprueba el Reglamento de Selección, Provisión de Puestos de Trabajo y Carrera Administrativa del Personal comprendido en el ámbito de aplicación de la Ley de la Función Pública Valenciana, y en uso de las competencias que legalmente tengo conferidas, esta Dirección General resuelve:
Convocar, para su provisión, el puesto de trabajo que se relaciona en la base tercera de esta resolución, de acuerdo con las siguientes bases...."
Ya pueden respirar, ya acabó la frasecita.
Sé que esta es la típica prosa jurídica, pero mas oscura no podría ser. Sintácticamente es impecable en apariencia, pero sucede que entre el "visto que hay" y el "resuelve" hay un número exagerado de palabras que hacen la frase ininteligible a la primera lectura. El mínimo cambio, para que esto fuera inteligible, sería poner los elementos de la frase en el orden correcto para explicarlo a un interlocutor; Primero debería ir el "Esta Dirección resuelve convocar....." y luego los complementos "Visto que hay bla bla bla bla bla bla" para finalizar con "esta convocatoria se ajustará a las siguentes bases...."
En los paises y en los sectores en donde hay competencia, la posesión de información tiene un valor transitorio, ya que la información se crea y cambia constantemente. Está en estado de flujo. En este caso, tener conocimiento de algo solo sirve durante el poco tiempo en que es relevante. Es mejor estar en el flujo de información dando y recibiendo lo que cada uno sabe con los demás que el atesorar lo poco que se sabe, porque será irrelevante mas tarde y nadie te ayudará a adquirir la nueva información que va surgiendo.
En cambio, en los paises y en los sectores estancados, donde no hay creación, la información es un conjunto de conocimientos fijos. Es mejor oscurecer lo que uno sabe para tener una ventaja sobre los demás. Era típico de la edad media el mantener ocultos los secretos de cada oficio. Ser un aprendiz era un privilegio que daba seguridad de por vida en una sociedad donde los estamentos limitaban estrictamente el numero total de profesionales de cada oficio. Exactamente igual que ahora aqui en algunas profesiones. Es lógico que en estos casos la información se oscurezca.
El burócrata se viste de oscuros papeles y complicados protocolos y trámites. El legislador infla las leyes con capas y capas de disposiciones adicionales o bien hace complejas leyes para asuntos menores, todo para que su nombre aparezca en la portada del mamotreto y deje huella de su fugaz paso por el Estado.
Cuantos menos se entienda su jerga, mas mérito y menos candidatos habrá dispuestos a acceder al oficio. Eso hace mas fácil meter a la familia y amigos en el negocio.
No es extraño que también los malos escritores sean tan aficionados a las frases largas y a los adornos rimbombantes.
A continuación figura un párrafo al azar de un texto de uno de los muchos diarios, diaris y diariños oficialeiros que hay por todas las comunidades y comunidadas. Se aconseja tomar aire antes de leer:
"Visto que hay un puesto de trabajo vacante del grupo A, sector General, en la Conselleria de Empresa, Universidad y Ciencia, cuya provisión se ha de efectuar por el sistema de Libre Designación, de acuerdo con lo que dispone la Ley de la Función Pública Valenciana y el Decreto 33/1999, de 9 de marzo, por el que se aprueba el Reglamento de Selección, Provisión de Puestos de Trabajo y Carrera Administrativa del Personal comprendido en el ámbito de aplicación de la Ley de la Función Pública Valenciana, y en uso de las competencias que legalmente tengo conferidas, esta Dirección General resuelve:
Convocar, para su provisión, el puesto de trabajo que se relaciona en la base tercera de esta resolución, de acuerdo con las siguientes bases...."
Ya pueden respirar, ya acabó la frasecita.
Sé que esta es la típica prosa jurídica, pero mas oscura no podría ser. Sintácticamente es impecable en apariencia, pero sucede que entre el "visto que hay" y el "resuelve" hay un número exagerado de palabras que hacen la frase ininteligible a la primera lectura. El mínimo cambio, para que esto fuera inteligible, sería poner los elementos de la frase en el orden correcto para explicarlo a un interlocutor; Primero debería ir el "Esta Dirección resuelve convocar....." y luego los complementos "Visto que hay bla bla bla bla bla bla" para finalizar con "esta convocatoria se ajustará a las siguentes bases...."
En los paises y en los sectores en donde hay competencia, la posesión de información tiene un valor transitorio, ya que la información se crea y cambia constantemente. Está en estado de flujo. En este caso, tener conocimiento de algo solo sirve durante el poco tiempo en que es relevante. Es mejor estar en el flujo de información dando y recibiendo lo que cada uno sabe con los demás que el atesorar lo poco que se sabe, porque será irrelevante mas tarde y nadie te ayudará a adquirir la nueva información que va surgiendo.
En cambio, en los paises y en los sectores estancados, donde no hay creación, la información es un conjunto de conocimientos fijos. Es mejor oscurecer lo que uno sabe para tener una ventaja sobre los demás. Era típico de la edad media el mantener ocultos los secretos de cada oficio. Ser un aprendiz era un privilegio que daba seguridad de por vida en una sociedad donde los estamentos limitaban estrictamente el numero total de profesionales de cada oficio. Exactamente igual que ahora aqui en algunas profesiones. Es lógico que en estos casos la información se oscurezca.
El burócrata se viste de oscuros papeles y complicados protocolos y trámites. El legislador infla las leyes con capas y capas de disposiciones adicionales o bien hace complejas leyes para asuntos menores, todo para que su nombre aparezca en la portada del mamotreto y deje huella de su fugaz paso por el Estado.
Cuantos menos se entienda su jerga, mas mérito y menos candidatos habrá dispuestos a acceder al oficio. Eso hace mas fácil meter a la familia y amigos en el negocio.
No es extraño que también los malos escritores sean tan aficionados a las frases largas y a los adornos rimbombantes.